Festival Internacional de Sitges

Con mucha suerte este año he podido acudir al Festival Internacional de Sitges aunque sólo fuera el último día, aunque un último día muy intenso, ya que vi cinco películas en menos de doce horas, todo un maratón.

Llegué a Sitges por la tarde, había quedado con unos amigos de la Sociedad Tolkien para dar una charla que finalmente no se realizó por una mala organización de los encargados, pero el punto positivo de esto fue que conseguí entradas gratis para ver varias películas.

Deprisa y corriendo me fui a uno de los cines, para encontrarme con una increible cola, por suerte conseguí un sitio bastante bueno, y la película no tardo en comenzar, se trataba de "Battle Royal 2", la gente estaba espectante y a la mínima se ponía aplaudir y vitorear de entusiasmo, sobretodo en escenas puntuales como el cameo de Takeshi Kitano, un derrumbe de rascacielos con gran parecido a las torres gemelas y por cada muerte de un estudiante que se anunciaba en la película. Diversión a tope y una gran pelícual, aunque me gusto más la primera.

Tras acabar la película salí y me fui al final de la cola que ya había formada (y no era pequeña) para la siguiente película en el mismo cine. Por fin conseguí entrar y conseguir un sitio medianamente bueno, aunque no muy bueno la verdad, para esta película había aun más espectación que para la anterior, ya que había conseguido ganar tres premios en el festival, se trataba ni más ni menos de "Zatoichi" de Takeshi Kitano, como en la anterior los aplausos eran costantes y en especial la presentación que corrió a cargo de uno de los actores principales junto con Beat Takeshi, Tadanobu Asano. La película fue increible, de las mejores que he visto en mucho tiempo, os recomiendo muchísimo que en cuanto la estrenen en los cines vayais a verla, por que os aseguro que no os decepcionara.

Cansado tras las dos películas, me marché a toda velocidad, a otra sala que se encontraba practicamente a la otra punta de Sitges para ver un maratón de terror, las películas eran Family Manson, Monster Man y otra de la cual no recuerdo el nombre. Las dos primeras películas que fueron Monster Man y la otra que no recuerdo el nombre, eran películas de terror de serie B, grandes dosis de risas con bisceras y sangre, y el director de Monster Man que se encontraba en la sala corriendo de un lado para otro y gritando tonterias en un inglés yanqui cada dos por tres. A punto de morir de sueño en la segunda película (eran las cuatro y pico de la mañana) aguante estoicamente y empezó la tercera pelícual, Manson Family, una película medio documental medio ficción, interesante pero la mar de aburrida y lenta con lo que estuve a punto de caer en un coma cerebral, pero aguante como un machote y a las siete de la mañana me dirigía yo, hacia la estación de trenes con un sueño increible y un frío aún más increible para volver a casa, aún pasarían casi dos horas antes de conseguir meterme en la cama (que mala fue la combinación tren-metro-autobús), pero satisfecho cerre los ojos pensando en bisceras, sangre, estudiantes japoneses y samurais.